El capitán de la selección argentina de fútbol, Lionel Messi, dejó abierta la posibilidad de jugar el Mundial 2026, a pesar de estar por cumplir 39 años. “Está lejos, pero pasa rapidísimo. Este año va a ser importante. Será fundamental poder jugar con continuidad y sentirme bien", contó en una entrevista difundida este jueves santo.

"Es una temporada larga porque no termina hasta diciembre y está el Mundial de Clubes. Pienso y veo, pero no me quiero poner metas. Voy día a día y veo cómo me siento físicamente y ser sincero conmigo mismo”, contó sobre la situación actual del astro argentino, hoy en el Inter de Miami.

Mientras jugaba el mundial de Qatar en 2022, Messi había admitido que podía ser su última Copa del Mundo. Tras salir campeón y dejar la alta competencia europea para embarcar en el fútbol estadounidense todo parecía que serían los últimos años de una carrera que ahora, buscaba la tranquilidad. Pero el espíritu deportivo y la pasión puede más.

"El año pasado arranqué la pretemporada y tuve algunas lesiones. Este año hice una buena pretemporada, arranqué bien y me siento bien", afirmó en una entrevista en el canal de streaming Simplemente Fútbol.

El frustrado regreso a Barcelona

“Tenía la intención de volver a Barcelona y poder regresar a un lugar donde siempre había soñado, pero no fue posible. Después de eso, se convirtió en una decisión familiar. El hecho de que ganáramos el Mundial también tuvo un gran impacto. Tenía claro que no quería estar en ningún otro equipo de Europa, no quería ir a ninguno”, recordó.

Quién fuera, quizás, su mejor técnico en el club catalán, Pep Guardiola, estuvo entre las opiniones de Messi. “Pep es de otro mundo. Es diferente, ve cosas que nadie más ve. Cambió el fútbol en esa época. Todos querían copiarnos, pero también, en cierto punto, hizo mal, porque la gente intentaba jugar como nosotros y éramos un equipo especial. Ese mediocampo: Xavi, Sergio Busquets, Iniesta… todo era perfecto entre jugadores y entrenador”, remarcó.

Fuente: Ámbito