Política
Trump gana las elecciones y vuelve a la Casa Blanca
Obtuvo 277 votos del Colegio Electoral y volverá a gobernar los Estados Unidos. También ganó por voto popular, controlará el Senado y se encamina a tener mayoría en la Cámara de Representantes.

Este martes en las elecciones presidenciales de Estados
Unidos, Donald Trump arrasó en Florida y las proyecciones por el momento lo dan
arriba de Kamala Harris en el Colegio Electoral, en donde tiene que conseguir
270 electores.
De acuerdo con LPO, Florida es un estado de mayoría latina que
se inclinó masivamente por el republicano a pesar de sus amenazas con deportar
a 11 millones de migrantes ilegales.
El estado se ha convertido en un bastión republicano pero la
ventaja fue más grande que lo esperado en la mayoría de los condados gracias al
voto de la población cubana y venezolana. Esta creciente hegemonía entre
latinos le permitió incluso ganar el condado de Miami Dade, histórico bastión
Demócrata.
En tanto, las proyecciones también le dan a los republicanos
la mayoría en el Senado y la Cámara de Representantes que, de confirmarse le
daría el dominio absoluto a Trump. El republicano está haciendo una elección
mejor de lo que vaticinaban las últimas encuestas.
Sin embargo, la expectativa está puesta en los siete estados
indecisos denominado “Swing State”, los estados “pendulares” que, alternadamente,
votan a candidatos demócratas y republicanos, y son los que definirían la
elección.
A propósito de eso, las proyecciones del New York Times dan a
Trump ganando Georgia y Carolina del Norte y lo tienen liderando en Arizona,
Pensilvania, Michigan y Wisconsin. Por eso, el diario demócrata la otorga un 84
por ciento de posibilidad de ganar la elección y 301 delegados.
Con este cuadro, en los demócratas impera ya cierto pesimismo
y afirman que la elección ahora se define en tres capitales: Detroit,
Philadelfia y Milwaukee, pero una señal de pesimismo es que Kamala Harris
decidió hablar, lo que hace recordar la elección de 2016 donde Hilary Clinton
hizo lo mismo para reconocer la derrota al día siguiente.