Política
Franzen: “En Misiones denunciamos a 15 represores y fueron juzgados sólo 5, y a algunos me los encuentro en la calle”
La sobreviviente de la represión ilegal del Estado durante la última dictadura cívico – militar y referente de la CTA Autónoma Graciela Franzen se mostró muy preocupada por el asesinato de Susana Montoya, la esposa de un militante del ERP ultimado en 1979, en cuya vivienda dejaron amenazas de muerte para toda la familia. Y se refirió a la impunidad de la que gozan algunos represores en Misiones.

Entre el jueves 1 y el viernes 2 de agosto, desconocidos ingresaron en la vivienda de Susana Montoya en Córdoba, y la asesinaron de un golpe en la cabeza y una cortada en el cuello, un crimen que conmociona al país y que estaría vinculado a las causas por lesa humanidad contra los represores que secuestraron, torturaron y asesinaron a personas durante la última dictadura cívico–militar de 1976.
“Los vamos a matar a todos. Ahora vamos por tus hijos. #Policía”, fue el mensaje que los asesinos dejaron en la vivienda de la víctima, que fue hallada por su hijo Fernando Albareda, quien también fuera amenazado en el marco de las causas por el asesinato de su padre Ricardo Albareda, un militante del ERP torturado y masacrado en 1979 por la temible patota D2 de la Policía mediterránea.
Para la militante por los derechos humanos, sobreviviente de la dictadura y referente de la CTA Autónoma, Graciela Franzen, no cabe duda que el asesinato de Montoya está vinculado con las causas por delitos de lesa humanidad, en un contexto preocupante, por el negacionismo en el que incurren varios funcionarios y diputados ultraderechistas de La Libertad Avanza, comenzando por la vicepresidente Victoria Villarruel.
“Apenas ocurrió el hecho, nos contaron compañeras de que estuvieron secuestradas acá y eran de Córdoba, y la verdad que esto es muy preocupante. Nosotros no tenemos antecedentes (de este tipo) en estos años de democracia. Tenemos lo que pasó con Julio López, que fue testigo a los juicios de Lesa Humanidad que está desaparecido (desde 2006, durante el gobierno de Néstor Kirchner), que fue testigo en La Plata y también de la compañera de Devoto, Silvia Suppo (asesinada en 2010, durante el gobierno de Cristina Kirchner), que es de Santa Fe y fue asesinada luego de dar su testimonio”, rememoró Franzen sobre casos similares –sobrevivientes de la dictadura asesinados o desaparecidos en Democracia–, pero en los que no hubo mensajes mafiosos.
“Esto (el asesinato de Montoya) nos parece realmente tremendo, terrible. Es volver al terrorismo de Estado y nos preocupa mucho el negacionismo que hay”, expresó Franzen, quien se preguntó “cómo podemos permitir como sociedad que la vicepresidenta (Victoria Villarruel) niega este terrorismo de Estado”.
“Ella (por Villarruel) es hija de un represor condenado. Entonces, negar esta realidad y de encima tener seis diputados (de la Libertad Avanza) que supuestamente nos tiene que representar a la sociedad, que visitan a genocidas condenados, que fueron condenados en España por el juez Garzón, condenados en Italia, en Francia, por los juicios de lesa humanidad, y condenado acá a cadena perpetua, con varias condenas a cadena perpetua, como (Alfredo) Astiz, por ejemplo”, subrayó Franzen, apuntando al negacionismo del gobierno de ultraderecha de la Argentina, con este crimen y amenazas concretados en Córdoba.
En esta línea, Franzen cuestionó a los diputados de La Libertad Avanza que visitaron a genocidas que les habrían entregado un proyecto para obtener la prisión domiciliaria. “Estos diputados fueron a visitar a genocidas que son reconocidos mundialmente. Nosotros somos el ejemplo, el único país del mundo, después del tribunal de Nuremberg que juzgó a los nazis, que tuvimos el valor, la osadía y el derecho de condenar a nuestros genocidas, a los que han perpetrado este terrorismo de Estado”, subrayó Franzen, recordando los crímenes cometidos por los represores que están presos y fueron visitados por los legisladores del oficialismo de ultraderecha.
“Nos parece gravísimo, terrible que estas autoridades que tenemos hoy, no solo nieguen, sino que vuelvan a cometer los mismos delitos que cometieron los militares y las fuerzas de seguridad, durante el terrorismo del Estado”, recalcó.
Consultada por Agencia Hoy, Franzen no dudó en señalar que el asesinato de Montoya, fue un acto de “venganza. Son los mismos que perpetraron esto de lo que están amenazando. Y son los mismos que niegan el terrorismo de Estado, que reivindican el operativo Cóndor, todo lo que s la persecución a los militantes populares de la década del setenta”, subrayó Franzen.
“Son los mismos. Es más, tenemos ante otro antecedente, hace poco también pintaron y amenazaron a chicos de la comisión de HIJOS por la verdad y la justicia, también en otras localidades en provincia de Buenos Aires. O sea que esto es esto recién empieza”, advirtió Franzen. Y acotó: “no podemos permitir nunca más que haya terrorismo de Estado, y esto vuelve a ser terrorismo. Amenazar con el terror a la sociedad”.
De acuerdo con Franzen, los actos para sembrar terror en la sociedad argentina, persiguen el mismo objetivo político que el de la Dictadura de 1976 – 1983, el de promover una política económica dañina para la mayor parte de la población. El terror es para “implementar exactamente lo mismo, un modelo económico del hambre, de la esclavitud, de volver a ser colonia. Esto no lo podemos permitir con estas leyes que este gobierno propuso y que lamentablemente nuestros representantes. que no nos representan, votaron a favor, esto es volver a ser colonia, es volver al 1800”, lanzó Franzen, en tono crítico hacia los diputados y senadores que acompañaron la ley Bases en el Congreso, entre los que están la totalidad de legisladores por Misiones.
Repreguntada al respecto, Franzen reiteró que existe un vínculo entre las amenazas y asesinatos perpetrados este año y la orientación política y económica del gobierno que encabeza el presidente Javier Milei. “Es terrorismo de Estado y no lo digo yo, lo dice la vicepresidenta. Lo dicen los mismos diputados que fueron a visitar a los a los genocidas, como también lo hicieron a con Horacio Losito, responsable de la masacre de Margarita Belén y de tantas muertes, tanto de compañeros militantes de Corrientes, de Chaco, de acá del litoral, que tienen tres o cuatro condenas a cadena perpetua y que le hayan dado la libertad y vayan a recibir honores en el regimiento de Apóstoles”, cuestionó Franzen sobre la libertad condicional que le concedieron al represor que fue homenajeado en el Regimiento Monte 30 en marzo.
“Un genocida, un asesino, no puede recibir honores, porque también está pendiente la causa por las torturas y el hambre que pasaron los soldados de Malvinas (bajo el mando de Losito) Esa causa todavía no se investigó, pero hay muchísimas pruebas y cientos de testigos”, aseguró Franzen sobre el represor liberado en diciembre del 2023, bajo el gobierno de Milei.
Adentrándose en la cuestión de los represores de Misiones, Franzen recordó que de los 15 acusados por delitos de lesa humanidad de la provincia, apenas 5 fueron condenados. “En 1984, a dos meses de la democracia, el 3 de febrero, hicimos una conferencia de prensa en el Ministerio de Gobierno con la Comisión de Familiares (sobrevivientes de la Dictadura), donde denunciábamos todo lo que habíamos vivido. Denunciamos a 15 represores, de los cuales fueron juzgados solo 5. Algunos murieron después, sin llegar a juicios, pero están libres muchísimos represores (en Misiones)”, advirtió Franzen.
“No tuvimos nunca abogado penal que nos acompañara a los juicios. Sí, el doctor Fernando Campelli, que es abogado de familia. Pero acá convivimos (con represores), acá en mi barrio tengo varios represores. Es más, uno de ellos, Julio Argentino Amarilla, que estaba en el Batallón 601 de Inteligencia, le denunciamos tres compañeros que le reconocimos la tortura y a los cuatro años salió libertad. Y está acá en mi barrio”, confió Franzen.
Y amplió: “Yo voy a la carnicería, voy al almacén y me encuentro con él. Es más, la primera vez que le vi, me sorprendí, porque me saludó como si fuese un conocido y me dice: ‘Hola Graciela, ¿cómo estás?’ ¿Cómo que voy a cómo voy a estar viendo a mi torturador, a mi violador, libre por la calle, como si la como si nada hubiese hecho?”, sentenció Franzen, en tono crítico hacia la justicia misionera, que no juzgó y condenó a asesinos, torturadores, secuestradores y violadores de la última dictadura militar.
Al respecto, Franzen no ahorró críticas a la justicia, a quien acusó de “defender a los intereses de los ricos, no de la población. ¿Quiénes están los quiénes están en las cárceles? Están los pobres (…) pero no así, el responsable del hambre de nuestros míos, de nuestra de nuestra sociedad”, replicó.
En esta línea, Franzen insistió en que “por el asesinato de muchos de los compañeros y muchos juicios todavía quedan pendientes” y en la represión participaron miembros de todas las fuerzas de seguridad y militares de Misiones.
“Hugo Matot, un sacerdote de tercermundista, fue perseguido y fue torturado en el escuadrón de Gendarmería en Concepción de la Sierra, como muchos compañeros. Pero a Gendarmería todavía no se investigó. Los compañeros de Eldorado, de Iguazú, de toda la zona norte los tuvieron los escuadrones de Gendarmería, y también la Prefectura participó en las torturas y en lo la las desapariciones de compañeros. También la policía federal. Todas las fuerzas participaron”, puso de relieve Franzen, reiterando que “hay muchos juicios pendientes todavía que no se llevaron a cabo, por la falta de abogado que nos acompañe como querellantes”.