Política
Qué dijo en vida, el Papa Francisco del gobierno de Javier Milei
El Sumo Pontífice que falleció este lunes, fue un defensor de los derechos sociales y su llamado a la organización popular contrastan con la visión individualista del gobierno ultraderechista de Argentina. Milei llegó a llamarlo “imbécil” y “representante del Maligno en la tierra”, antes de llegar a la Casa Rosada.

Durante su papado, Jorge Bergoglio fue muy crítico con el gobierno de Javier Milei y en varios discursos, se refirió expresamente a la situación social y económica de Argentina, denunciando la represión de la protesta y cuestionando la negación de la justicia social.
Según publicó el portal El
Destape, esas declaraciones del Papa Francisco –fallecido hoy a los 88 años de
edad– generaron una fuerte reacción en el gobierno argentino, marcando
distintos episodios de tensión entre el Pontífice y la administración ultraderechista.
Las palabras del Papa cobran
especial relevancia debido a su habitual reserva para referirse a políticas
nacionales de manera tan directa. En esta ocasión, Jorge Bergoglio denunció el
uso del “gas pimienta de primera calidad” para reprimir manifestaciones en
Argentina, y reivindicó la lucha de los movimientos populares.
Además, cuestionó la “meritocracia”,
una de las bases ideológicas del gobierno de Milei, y denunció la acumulación
de riqueza como una práctica nociva.
Su discurso también incluyó
una dura advertencia sobre la corrupción en la política, relatando el caso de
un ministro argentino que habría pedido una coima a un inversor extranjero. “El
diablo entra por el bolsillo, no lo olviden”, advirtió el Papa, en una
declaración que resonó en el contexto de las recientes denuncias por corrupción
que salpican al presidente Milei y su hermana Karina.
Francisco se había referido a
la creciente pauperización de la clase media argentina y cuestionó cómo las
políticas económicas actuales afectan a los sectores más vulnerables. “Si los
movimientos populares no reclaman, no gritan, no luchan, no despiertan
conciencias, las cosas van a ser más difíciles”, alertó por entonces el Papa.
En una de las críticas más
fuertes contra el modelo ultraderechista que defienden Milei y sus aliados del
PRO y la UCR, Francisco condenó la exaltación de la acumulación de riqueza como
una virtud. Estas palabras son una clara oposición a la visión de la economía
que defiende Milei. “Acumular no es virtuoso, distribuir, sí”, planteó el Papa,
y remarcó que “tierra, techo y trabajo son derechos sagrados”.
Otro de los puntos destacados
del discurso de Francisco durante su papado, fue la relación entre la
corrupción y la presión de los grandes grupos de poder sobre la clase política.
“La cobardía lleva a muchos políticos a cambiar sus convicciones por sus
conveniencias”, se lamentó, en una aparente referencia a la votación
legislativa en Argentina en el año pasado, donde algunos diputados –entre ellos
el misionero Martín Arjol– habían cambiado su postura en favor del oficialismo.
En un contexto de crisis
económica y social, las palabras del Papa Francisco resuenan con fuerza en
Argentina. Su defensa de los derechos sociales y su llamado a la organización
popular contrastan con la visión individualista del gobierno de Javier Milei.
De hecho, Milei llegó a
llamar a Francisco, “imbécil” y “representante del maligno en la Tierra”, antes
de convertirse en presidente, en 2023. Luego pidió disculpas por esas
declaraciones y en febrero del año pasado, lo visitó en el Vaticano.