Política
Diputado acusado de pedofilia: Días antes del segundo allanamiento en su casa, Kiczka se reunió con Serenellini en la Rosada
Del encuentro del pasado 1° de agosto, con el secretario de prensa de la Nación, Eduardo Serenellini, formaron parte el diputado provincial Pedro Puerta, el conductor del partido Activar, y la diputada nacional Florencia Klipauka, que forma parte del espacio político e integra el bloque de La Libertad Avanza en la cámara baja del Congreso. La causa se inició en enero y a fines de febrero, se concretó un primer allanamiento en la casa del ahora exdiputado prófugo.

El caso del exdiputado provincial Germán Kiczka (Activar – La Libertad
Avanza) destituido el jueves pasado en el marco de una causa en su contra por
distribución de material de abuso sexual infantil, que impacta a la sociedad
misionera y a la clase política del país, continúa escalando y salpicando a
autoridades nacionales.
Es que, el pasado 1° de agosto, el hoy prófugo de la justicia
Germán Kiczka, participó de una reunión en la Casa Rosada con el secretario de
prensa de la Nación, Eduardo Serenellini, de la que también participaron su
amigo y jefe político Pedro Puerta –también diputado provincial– y la diputada
nacional Florencia Klipauka, quien actualmente forma parte del bloque de La
Libertad Avanza.
Medios de la provincia reportaron por entonces, que el encuentro
entre los diputados y el funcionario nacional, constituyó “una jornada marcada
por el intercambio de ideas y la comunicación”.
“La reunión, que tuvo lugar en el emblemático edificio
gubernamental (Casa Rosada), sirvió como un espacio para que los representantes
políticos compartieran sus perspectivas sobre la gestión del gobierno nacional
y discutieran temas de relevancia tanto a nivel nacional como provincial”,
detallaron en el portal MisionesCuatro, propiedad de la familia Puerta.
“El encuentro concluyó con un acuerdo general sobre la
necesidad de seguir trabajando en conjunto para enfrentar los retos que se
presentan y aprovechar las oportunidades de desarrollo para el país”,
detallaron en el citado medio sobre el cónclave entre Serenellini, Puerta,
Klipauka y Kiczka.
¿Por qué es relevante esa reunión? Porque apenas una semana
más tarde, el 7 de agosto, se concretó un segundo allanamiento en la casa del
ahora exdiputado prófugo, por orden del juez de instrucción de Apóstoles Miguel
Faría. En ese procedimiento se incautó una computadora y otros elementos de interés
en el marco de la causa por distribución de MASI (Material de Abuso Sexual
Infantil), pedofilia y corrupción de menores que tiene imputados al exdiputado
y a su hermano Sebastián Kiczka.
Más relevante aún: la causa se inició el 16 de enero del presente
año, es decir, más de 6 meses antes de la reunión de Serenellini, Puerta,
Klipauka y Kiczka. Según confió el juez Faría a medios nacionales, la causa
comenzó cuando la fiscal porteña Daniela Dupuy recibió una notificación en su
casilla de correo, en el marco de una investigación internacional que impulsó
una ONG en Estados Unidos.
Inmediatamente comenzó una investigación que identificó 8
domicilios sospechados y el 28 de febrero, se llevaron a cabo los primeros allanamientos. Entre ellos, los de los hermanos Kiczka. Es decir, 5 meses antes
de la reunión con Serenellini, que se mantiene en silencio sobre el resonante
caso que impacta en todo el arco político provincial y nacional.
El secretario de prensa de la Nación, ni siquiera mencionó lo
charlado con el ahora exdiputado prófugo, igual actitud que la adoptada por la
Ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich: la funcionaria nacional
optó por el silencio absoluto sobre el caso que la salpica porque los hermanos
Kiczka lograron huir de la provincia –y presumiblemente del país– pese a la
supuesta vigilancia que llevaba a cabo la policía de Misiones.
De hablar sobre el caso, Bullrich debería valorar el trabajo
de su par de Misiones, el ministro de gobierno Marcelo Pérez, quien es el
responsable político de la huida del empresario y del político acusados de
pedofilia y de distribuir material de explotación sexual infantil.
Los que sí hablaron del caso fueron el diputado provincial
Pedro Puerta y el exdiputado nacional Alfredo Schiavoni. El primero trató de
despegarse de su otrora amigo personal, al señalar que la parece “vomitivo” todo
lo que salió a la luz con relación a la causa, y recalcar que no tenía ningún conocimiento
de la vida privada de Kiczka, pese a que este último llegó al cargo legislativo
por su “militancia” en Activar –fue apoderado del partido.
En tanto exdiputado del PRO
Alfredo Schiavoni, antes de que se filtre a los medios el material aberrante
encontrado en la computadora de Kiczka, opinó que la causa se trataba de una “berreta
operación política”. Ahora, se llama al silencio, al igual que los principales funcionarios
del gobierno nacional y de La Libertad Avanza.