Provinciales
Klingbeil: “A las familias tealeras, yerbateras y la gente apostó a la mandioca, les está yendo mal con todo”
El productor y referente tealero de la zona Centro de Misiones, consideró crítica la situación que padecen los sectores productivos, por la sequía y las plagas como ácaros y “rulo”, en un escenario en el que el valor del dólar les está haciendo perder mercados de exportación. Y arrojó un manto de duda sobre los $2.400 millones que la provincia direccionó al “Programa de Apoyo a la Actividad Yerbatera” que maneja el exIFAI.

Es crítica la situación de los productores yerbateros y tealeros,
entre otros cultivadores, a causa de la sequía, las plagas y el desplome de los
precios productivos, según confió a Agencia Hoy, el agricultor y referente
tealero Cristian Klingbeil. Asimismo, el dirigente se mostró escéptico sobre el
direccionamiento de $2.440 millones al “Programa de Apoyo a la Actividad Tealera”
que dispuso el gobernador Hugo Passalacqua a través del Decreto N° 1482/2024.
Este programa que lo maneja el IMAC (Instituto de Macroeconomía Circular, antes
IFAI –Instituto de Fomento del Agro y la Industria), recibió la mencionada suma
el pasado 15 de julio del 2024.
“Poner plata para la actividad yerbatera en sí, excepto que
sea un emprendimiento totalmente nuevo, donde se le dé otro tipo de salida a la
actividad, a la producción de yerba, es plata tirada de balde. ¿Por qué? Porque
que no es la salida de la crisis, que aparezcan más marcas de yerba, que intenten
competir en un mercado donde ya hay una competencia terrible, donde va bajando
el precio de la yerba a salida molino y el consumo que no se reactiva. Es
simplemente poner más colores de distintos paquetes en la góndola”, planteó
Klingbeil.
En cambio, “si alguien (en el gobierno) aparece con una idea
para sacarle otro producto de la yerba mate, que no sea para tomar mate, tereré
o mate cocido, bueno ahí sí, tiene sentido” la inversión en el Programa de
Apoyo a la Actividad Yerbatera.
“Hasta pasar este verano tan duro, o esta temporada tan dura en la yerba mate, lo que la provincia debería hacer es buscar la manera de sostener a las pequeñas familias, las familias de pequeños productores que están tan complicadas en la chacra, que tienen sus hijos estudiando, que no saben cómo hacer para mantener que sus hijos sigan sus carreras, que cumplan sus sueños”, alertó Klingbeil.
Asignaron $2.440 millones al exIFAI para el “Programa de Apoyoa la Actividad Yerbatera”
En esta línea, el referente tealero de la zona centro de
Misiones, consideró que este enfoque se debería adoptar en el manejo de los
recursos del Agro de la provincia. “Me parece que ahí debería estar el apoyo
más puntual a las familias más complicadas y no inventar otras cosas porque es
tirar plata, excepto de que sea simplemente para ayudar a amigos. Lamentablemente
esa es la mayor desconfianza que hay en el sector”, admitió Klingbeil sobre las
sospechas en torno a los $2.440 millones que reforzaron el presupuesto del
IMAC.
Para sintetizar su punto de vista, Klingbeil planteó: “hoy por
hoy las familias tealera, yerbatera y por ahí, la gente apostó a la mandioca y
bueno le está yendo mal con todo. Yo creo que ahí la provincia debería estar
viendo detalladamente más el problema que están padeciendo algunas familias y ayudar
a estas familias que están más complicadas, y no estar con estos proyectos que
no sirven en este momento”, planteó.
Según Klingbeil, la propia crisis hace improcedente que el
Estado provincial inyecte créditos o aporte insumos en el Agro, cuando “el
precio de la yerba no para de caer, y no se ven posibilidades de repunte. En un
mercado donde se están sacando los ojos, los grandes yerbateros (por la fuerte
competencia) no sirve de nada entrar en esa pelea de dinosaurios con
emprendimientos chicos”, sostuvo.
En esta línea, Klingbeil remarcó que entregar insumos,
fertilizantes, etc., genera gastos al agricultor, que no sabe si recuperará en
el presente escenario económico y climático. “Vos le estás dando un producto
para que apliquen la chacra, y le estás generando gastos. O sea el productor
tiene que estar moviendo algún tractor, una camioneta, arrimar agua y estar
aplicando”, describió Klingbeil, poniendo de relieve el problema de la sequía.
“Guaraní es una de las zonas donde menos llovió en lo que va del
mes de enero. Llovió ayer 20 milímetros en Oberá y en Guaraní nada. Hay unas
zonas donde directamente no está lloviendo. Entonces de qué te ayuda a estar
aplicando insumos a la yerba o al té o a lo que sea, si no hay lo fundamental
que es la lluvia, que es el agua”, explicó Klingbeil.
Según Klingbeil, actualmente sus plantaciones de té están
sufriendo un “terrible” ataque de ácaros, que “es más por la falta de lluvia
que por otra cosa. Entonces hay gente que necesita una mano directa, y no que
le den cosas para que gaste más”.
Actualmente, “las familias de los pequeños productores que son
los que están más complicados, que están afectados sus yerbales por ataque de ‘rulo’
(psílidos, una familia de insectos hemípteros del suborden Sternorrhyncha) o no
tienen suerte con los chaparrones, a esa gente hay que ir a darle una mano
directa para que pase el momento o hasta que repunten los precios de las
producciones”.
“Y darle una mano en serio, pero no con este tipo de programa
porque lo más seguro es que termines recibiendo algún beneficio, alguien en
particular, con un negocio X, y muy poco esté recibiendo de ayuda el que más
necesita, que hoy es el productor”, amplió Klingbeil.
Por otra parte, el productor criticó también el anuncio del
gobierno provincial que se atribuye el logro de la medida de Nación, de eliminar
las retenciones a las producciones de las economías regionales, cuando la yerba
mate y el té hace tiempo que no tenían retenciones.
“Me llama la atención, me causa gracia y me molesta a la vez
que la provincia se adjudique la quita de retenciones a las economías
regionales cuando las economías regionales ya no tenían retenciones, como el té
y la yerba. No sé en cuánto le favorece al tabaco y a la madera esa quita de
retenciones a economías regionales”, detalló el productor.
De acuerdo con Klingbeil, la provincia “se adjudica algo y
sacan títulos de diarios, como si fuera un gran logro por parte de la gestión
de ellos, y como que le da un plus a la producción misionera. Y a la yerba y al
té no nos cambia nada porque no teníamos retenciones. Creo que la última
retención que nos quedaba era en la yerba, la había sacado (el exministro de economía
Sergio) Massa, me parece”, dijo.
“Después ya el té hace rato que no tenía retención, entonces
es una forma de informar desinformando, porque realmente se cuelgan laureles
que no tienen ninguna razón de ser”, amplió Klingbeil.
Asimismo, el tealero comentó que estas medidas del gobierno
nacional preocupan al sector, porque apuntan a que no se va a devaluar el peso
contra el dólar oficial. “No sé qué festejan porque no teníamos retenciones y a
la vez a nosotros nos preocupa más esa quita retenciones porque lo que nosotros
necesitamos es un dólar diferenciado, un dólar más alto para poder seguir
produciendo y seguir siendo competitivos en el mundo”, consideró.
“Y así (con un peso sobrevaluado) perdemos con la yerba,
perdemos con el té, perdemos con cualquier competidor porque no podemos hacerle
frente. Entonces no hay ninguna noticia positiva porque si el gobierno sacó
esas retenciones ya dijo como que con esa quita y la merma (de impuestos) a las
otras producciones, es la última medida que van a tomar”, argumentó.
“A nosotros nos preocupa porque nuestros costos siguen
subiendo siguen siendo muy altos en dólares y no podemos competirle a nadie. Estamos
prácticamente perdiendo el mercado o con peligro de perder mercados. Y los nuevos
arancelamientos de Estados Unidos (por la política proteccionista de Donald
Trump), vamos a ver cómo va a impactar”, alertó Klingbeil, añadiendo que el norteamericano “es nuestro mayor mercado en
el té.”
“Nos preocupa y mucho esas cuestiones y cada día estamos un
poquito más preocupados. Encima, hay un ataque de ácaro impresionante en el té,
una caída de producción muy grande. Y en la yerba también. Por lo menos acá en
la zona de centro, mucha presencia de rulo”, contó Klingbeil.
Finalmente, el productor anticipó que va a haber una “merma
significativa de producción y no hay una medida económica en serio que
realmente ayude a que podamos sacar (el barco) a flote”.